Actualización 10/08/2022: el miércoles, el Tribune informó que Riot Fest terminó su relación con Scott Fisher debido a su tono en esta reunión comunitaria.
El martes por la tarde, alrededor de una docena de residentes se reunieron cerca de la cancha de fútbol en Douglass Park en la Villita para una reunión comunitaria sobre Riot Fest que los dejó con más preguntas que respuestas.
Fue la primera reunión comunitaria dirigida por Riot Fest desde que el festival de música de tres días se mudó a Douglass Park hace siete años, luego de que fuera expulsado de Humboldt Park. Según un representante del Distrito de Parques de Chicago, los eventos grandes deben organizar una reunión comunitaria no menos de 45 días antes del evento como parte de un proceso de participación comunitaria.
No había agenda en la reunión dirigida por Scott Fisher, un contratista independiente contratado por Riot Fest. Según los contratos que Riot Fest firmó con el Distrito de Parques en 2015 y 2016, Fisher es el fundador y presidente de la compañía Special Event Services Group (SESG, por sus siglas en inglés), que Riot Fest contrata como el proveedor principal de servicios. Fisher dijo que esta sería la única reunión comunitaria antes de que Riot Fest se lleve a cabo en septiembre.
Los residentes se quejaron de que la reunión estuvo mal publicitada , carecía de estructura e ignoró sus intereses.
“Hoy no fue una buena reunión porque fue organizada en desventaja de la comunidad”, dijo Denise Ferguson, una residente que lleva décadas viviendo en el vecindario. “Ocurrió cerca de las 12:30 de la tarde en un martes; algunas personas aquí tuvieron que salir del trabajo para venir. La mayoría de los vecinos que viven al otro lado de la calle, que están directamente afectados por el festival, no están aquí y probablemente no sabían de esta reunión”.
Fisher dijo que la semana pasada enviaron volantes sobre la reunión por correo.
Debajo la sombra de los árboles que flanqueaban el campo de fútbol, los residentes interrogaron a Fisher durante casi una hora sobre el festival. Un residente le preguntó por qué Riot Fest eligió Douglass Park como el sitio del evento.
“Este tipo de festivales no pertenecen en una comunidad de clase trabajadora”, dijo el residente. “Hay otros lugares en el centro de la ciudad o en el lado norte, así que tengo mucha curiosidad por saber por qué elegiste Douglass Park”.
“No participé en la selección de esto, así que no puedo responder eso”, respondió Fisher.
“Pero estás aquí y esta es la reunión comunitaria para Riot Fest”, gritó otro residente.
“Escuchen si no pueden entender inglés puro y el hecho de que no puedo responder esa pregunta. . .”, dijo Fisher antes de que sus palabras fueran ahogadas por residentes enojados.
Otro residente preguntó cuánto dinero ha donado el festival a los concejales.
“No damos dinero a los concejales”, respondió Fisher.
En 2020, SESG, la compañía de eventos de la que Fischer es presidente, donó $2,000 al concejal George Cardenas, el concejal local que tiene la última palabra sobre el festival.
“¿Cómo vas a proteger la seguridad de las personas que atienden el concierto?” preguntó un residente, haciendo referencia a un incidente del año pasado cuando un hombre murió después de caer en las vías del Kedzie Pink Line horas después de Riot Fest.
“De lo que yo sepa, ese tipo no era parte de Riot Fest”, dijo Fisher. “El hecho de que algo suceda durante el Riot Fest no significa que ocurrió dentro de Riot Fest”.
“No tiene ningún sentido organizar una reunión comunitaria si nada de lo que la comunidad diga no hace ninguna diferencia en cómo Riot Fest hace las cosas”, dijo otro residente. “Es un gasto de tiempo para todos”.
“Te hemos escuchado, pero lo único que quieren escuchar es que les diga que ya no va ver Riot Fest, es correcto?”. preguntó Fisher.
Tampoco había intérpretes en la reunión, lo que dificultó las cosas para residentes como Jorge Ángel, que no habla inglés.
“Parecía que [Fisher] evadió todas nuestras preguntas, pero no pude entender mucho”, dijo Ángel en español. “Esperaba un traductor porque la mitad de este barrio habla español”.
Desde que Riot Fest se mudó a Douglass Park, han llegado dos festivales más: Lyrical Lemonade’s Summer Smash, que ocurre en junio, y Heatwave, en julio. Para los residentes, eso significa que el parque no está disponible para el público durante 46 días, o más de un cuarto del verano.
“Ahora que tenemos tres festivales, se siente como si el parque nunca tiene la oportunidad de repararse, y cuando se repara, ya es la temporada de festivales otra vez”, dijo José Manuel Almanza.
Las ligas de fútbol para jóvenes y adultos se ven obligadas a encontrar otro parque para jugar durante el verano, mientras que las familias se quedan sin un área de juegos para sus hijos.
“Algo de lo que no se habla es de los vendedores que dan de comer a la gente que viene a los partidos de fútbol”, dijo Almanza. “Esos vendedores tienen que pagar una pequeña tarifa para vender su comida aquí. Ahora, durante el verano, esos vendedores pierden acceso a sus ingresos y nadie les iguala. La ciudad no les da un descuento, no les devuelve su dinero, ni les da una alternativa. Simplemente son excluidos.
“Claro, la gente de clase trabajadora tiene el menor capital político, así que todos se están aprovechando de nosotros”.
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